El caos de lo que me gusta

Me gusta el cielo, me gustan las estrellas, me gustan los paisajes que me hacen sentir en paz conmigo misma, me gusta la calma de la playa pero solo un ratito, me gusta escuchar música todo el día, desde que me levanto hasta que me acuesto.

Me gusta estar con mis amigas y estar sola a partes iguales. Me gusta (y mucho) cuando llego a casa los viernes y veo a mi perro volverse loco. Igual de loco que cuando me levanto por la mañana y viene a darme los buenos días. Me gusta tener miles de cosas que hacer y también sentir que ya lo he hecho todo. Pero más me gusta sentir que ya lo he hecho todo y que me quedan ganas de seguir haciendo cosas diferentes y dispares. Me gusta que me guste lo que hago y lo que estudio.

Me gusta poder darme cuenta por mí misma de que he evolucionado. De que estoy aprendiendo a darme cuenta de lo que sé y de lo que no sé, y aceptarlo. Sin más competitividad que conmigo misma. Me gusta darme mi espacio y quitármelo.  

Me gusta el caos en el que vivo, y que yo sola me provoco. Y todo esto para decir que hace unos años escribí un texto que me gustó, y a día de hoy leo y me sigue gustando, por raro que (me) parezca.

Aquí lo tenéis, ahora me gusta que también sea vuestro.

Caos: "del latín chaos: situación en la cual sobresale y prima el desorden y la confusión". Esta es una de las muchas definiciones que podemos encontrar en el diccionario sobre esta palabra. Pero, ¿es esto en realidad el caos? Personalmente, creo que el caos es cualquier cosa que te altere por dentro, cualquier cosa que te haga sentir algo especial de repente.

Caos es una canción que te transmite miles de emociones a la vez y que tú, aunque quieras, no puedes explicar. Caos es esa voz que te transmite paz. Caos es esa persona que llega de pronto a tu vida, sin esperarlo, sin buscar ni pedirte nada, y te lo da todo. Y lo pone todo patas arriba. Y te da un vuelco al corazón.

Caos es ver a una persona y saber que será para siempre. El amor es un gran caos. La amistad es un gran caos. Tu vida tal y como tú la vives es un caos. Las desgracias son un caos. Todo es un caos si lo vives como tal. Intensamente, disfrutando y aprendiendo de las buenas situaciones, pero sobre todo de las malas.

Caos es llorar. Llorar mucho. Llorar por lo peor que te pueda pasar hasta no poder más. Llorar de alegría por la mejor noticia de tu vida. Llorar por los pequeños detalles, por las pequeñas personas que en un momento se convierten en grandes.

Caos es reír. Reír por la mayor tontería posible. Llevar una sonrisa siempre en la boca. Reír a carcajadas con LA persona. Reír a carcajadas con tu familia. Reír a carcajadas con tu mascota. Reír es vivir, y vivir es un caos.

Caos: "del latín chaos: situación en la cual sobresale y prima el desorden y la confusión." Entonces, ¿es esto en realidad el caos?

Vivir, vivir y vivir...